En 2018 se cometieron 1.799 delitos de odio contra personas judías en Alemania frente a los 1.504 de 2017, según datos oficiales. Otro aumento preocupante son los delitos de odio racistas, que han subido un 33% y en cifras totales se acercan a los delitos antisemitas. Mientras, los delitos xenófobos se mantienen -con diferencia- en los niveles más altos entre los delitos de odio, con cerca de 8.000 casos al año. La buena noticia: los delitos contra refugiados y musulmanes por cuestiones religiosas han descendido de forma significativa.
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8.000 delitos de odio xenófobos al año
En 2018 se cometieron 1.725 delitos de odio racistas en Alemania frente a los 1.300 de 2017, de acuerdo con los datos presentados este mes por el Ministerio del Interior germano. Existe un aumento significativo de delitos de odio racistas desde el año 2015, en el que Angela Merkel abrió las puertas a los solicitantes de asilo que huían de la guerra en Siria y otros países de la región. Aquel año se registraron por primera vez más de 1.000 delitos de odio racistas en las últimas dos décadas; y sobrepasaron los mil con mucho: fueron directamente 1.214.
Pero es la xenofobia la que constituye el tipo de delito de odio más común entre los registrados por el Ministerio del Interior alemán. Sin embargo, no es noticia porque mantiene sus altas tasas a lo largo de los últimos años. Los casos de delitos de odio xenófobos también aumentaron significativamente en 2015. Aquel año hubo más de 8.500 casos, una cifra que rozó los 9.000 al año siguiente, cuando en años anteriores se había mantenido en una tercera parte. En 2017 habían descendido, pero en 2018 han vuelto a incrementarse a cerca de 8.000.
Delitos antisemitas aumentan un 20%
El antisemitismo ha aumentado un 19,6%, con 1.799 casos registrados como delitos de odio contra los judíos en 2018, frente a los 1.504 de 2017. Los datos no habían sido tan altos desde 2006, cuando se registraron 1.809 delitos de antisemitismo en Alemania.
Las estadísticas oficiales con retrospectiva desde el año 2018 hasta 2001, muestran que los delitos de odio contra personas judías se han mantenido en una media anual de casi 1.500 en las últimas dos décadas.
Notable descenso en delitos contra hogares de refugiados y musulmanes
En años anteriores, lo que más había preocupado era el aumento de agresiones tanto contra musulmanes como contra refugiados. Así, el Ministerio del Interior destacó como dato positivo el descenso en los ataques contra alojamientos para personas refugiadas, que han vuelto a cifras anteriores a 2014. En 2018 fueron 173 los ataques contra estos lugares de acogida de refugiados, frente a los 995 que se produjeron en 2016. En solo dos años, estos delitos han descendido un 80%.
En cuanto a los delitos registrados como islamofobia, también han descendido. Pasan de 1.075 delitos en 2017 a 910 en 2018, lo que supone una bajada del 18%.
Este tipo de delito de odio se mide oficialmente en Alemania desde 2017, al igual que los ataques contra cristianos por sus creencias. Los cristianos también han sido agredidos por su religión en 2018, si bien en una proporción mucho menor: 121 delitos registrados (129 el año anterior).
Anteriormente, este tipo de delitos se enmarcaban en un apartado dedicado a “Religión”. Si bien desde el Ministerio del Interior germano señalan que por este motivo no se pueden comparar exactamente las cifras con años anteriores, vale la pena señalar que partir de 2015 se triplicó la tendencia de años anteriores en delitos de odio por motivos religiosos: aquel año pasó de una media en torno a los 400 casos anuales a más de 1.100.
Por otra parte, diversos expertos e instituciones a nivel internacional, como la Red Europea Contra el Racismo (ENAR, por sus siglas en inglés), consideran que la islamofobia no es únicamente un tipo de odio por cuestiones religiosas, sino que incluye cuestiones racistas.
El presidente de la Oficina Federal de Investigación Criminal (BKA), Holger Münch, considera «preocupante, sobre todo, el aumento de delitos violentos y delitos propagandísticos en asuntos de antisemitismo, xenofobia y racismo”. Durante la presentación de estos datos, se comprometió a permanecer “altamente sensibilizados» y “continuar esforzándonos por desenmascarar y esclarecer” los delitos de odio.