Las víctimas de los atentados de Cataluña afrontan el juicio con “menos confianza” en que la verdad salga a la luz. “La verdad no cura, pero es un bálsamo que ayuda a seguir adelante”, explica la jefa de la unidad de psicología que atiende a la mayoría de las víctimas psicológicas de Barcelona y Cambrils.