La Comisión Islámica de España (CIE) señala tres problemas enquistados para los cerca de dos millones de musulmanes en España, el 43% de ellos españoles: Murcia y Cataluña dan la callada por respuesta cuando se les recuerda su deber legal de ofrecer clases de religión islámica donde haya demanda. Badajoz se lleva otro varapalo por «negarse» a ofrecer sepultura según el rito musulmán.